No more heroes anymore

por Gontzal Mnez. de Estibariz

Habían sido días extraños y de profundo sufrimiento los pasados, primero en la UCI, y luego en planta. Un caso excepcional debido a su juventud, le dijeron. Por fin dejaba el hospital. Su padre conducía el taxi camino a casa llevando una mascarilla como medida preventiva. Nunca es tarde si la dicha es buena – pensó Sofía – mientras escuchaba a través de sus cascos un grupo de tardío descubrimiento. Asentía, moviendo acompasadamente su cabeza arriba y abajo al ritmo de la música mientras el cantante espetaba… “¡Como quieres mentes puras si cagamos juntos!” Pensó que todos y cada uno de los héroes que habían adornado la historia erann una farsa. Presidentes, generales, líderes religiosos, estrellas mediáticas… Bufones. Malos actores de los distintos actos de la trágica comedia humana. Macacos onanistas, ególatras, flatulentos, políticos. Pensó que el verdadero héroe es el que pasa sin estridencias por la existencia, como un leve suspiro, una brizna de aire fresco. El que se mimetiza con su entorno natural y social, amándolo, complementándolo y lo abandona sin hollarlo, sin mancharlo. Sus ojos se humedecieron y notó que sus labios comenzaban a temblar. Sintió una profunda emoción de eterna gratitud hacia los médicos y cuidadores que le habían atendido en los últimos días. Sus nuevos héroes. Héroes del amor. Héroes no bélicos de la afirmación de la vida.